como nos enseñaron en la escuela

"...despacio y con buena letra...",
así nos enseñaron en la escuela a escribir...



Grafiti o pintada sobre pared en baño público, Bogotá.

La imagen capturada en esta fotografía, palabra escrita con letras grandes y visibles, pone en escena los cruces e hibridaciones entre lo "culto" y lo "popular", entre lo que se ha considerado y enseñado como buenas maneras de hacer las cosas  (escribir bonito) y lo que se ha considerado censurable o prohibido decir (expresar groserías). Estos cruces se ponen en evidencia también en el hecho de que quien escribió la pintada escogió hacerlo en un lugar público, para uso de cosas que todos tenemos que hacer pero que se asumen socialmente como vergonzosas y por lo tanto, no sólo como privadas sino como íntimas. No obstante, al ser un baño público, queda escondido, en reserva, pero a la vez publicado para todo aquel que se encuentre con dicha expresión al suspender sus actividades en virtud de sus necesidades fisiológicas.

 

No se sabe ni se puede saber si esta pintada se realizó como un mensaje codificado para otro, ni mucho menos, podemos "descifrar" su significado. Además, la hibridación aumenta en el hecho de que sólo ciertos sectores sociales se atreverían o estarían dispuestos a buscar satisfacer sus necesidades de cagar y orinar en baños públicos como estos. En ese sentido, ¿qué tan publico es lo denominado "público"? ¿De qué público se trata?

Ahora bien: que sea publicado en un blog le da por tanto, otra connotación. En ese sentido, que una palabra como esta, que suele decirse con rabia o con desprevención o con el ánimo de maldecir, ofender o despreciar a otros o a algo, aparezca escrita con letra bonita, adornada, sea sacada de ese ámbito inicial y luego puesta en esta espaciotemporalidad que es la web, es para sugerir a quien la ve las contradicciones del mundo social, en el que las buenas maneras o sanas costumbres de decencia, urbanidad y respeto frente a los demás que se enseñan, se aprenden y se procuran cuidar todo el tiempo, parecen ser más bien la fachada y el velo que esconde modos grotescos de proceder entre los que se encuentran la discriminación social, los mecanismos de exclusión y las leyes, normas o costumbres a través de las cuales estos mecanismos se pretenden legitimar.